Urdangarín se convierte en el principal protagonista del desfile de carrozas celebrado en Rubiáns
Las fiestas de Rubiáns en honor a Santa Plácida y a San Ramón llegaban ayer a su fin –durando un día menos de lo que suelen extenderse a consecuencia de los recortes que la crisis obliga a hacer en todas las facetas de la vida pública.
El Desfile de Carrozas es una especie de carnaval de verano ya hace unos años instaurado, en el que muchos disfraces están basados en temas de actualidad. Lo suelen organizar los vecinos de todos los lugares que pertenecen a Rubiáns. No es obligatorio disfrazarse y siempre es una sorpresa cuánta gente participará en él hasta que comienza.
Este año pudieron verse algunos disfraces de los de siempre como el de sevillanas o una pequeña mariquita, pero destacaban sobre todo dos grupitos uniformados: un grupo de ciclistas– moteros con la bandera de España y un grupo de "prostitutas" vestidas con papel de periódico y con los nombres de algunos periódicos en la parte posterior de su espalda. Uno de los disfrazados con el titular "O Nooso Caso", y no faltó tampoco Urdangarín con un maletín con el mismo enunciado, y la infanta Cristina de su mano, muy felices y sonrientes.
Otro disfraz destacado lo llevaba una mujer completamente cargada con bolsos y con un cartel de todo a 1 euro, a modo un poco de burla a la crisis y a los mercadillos.
Y a la cola de todo, cerrando el pintoresco desfile, les acompañaba una furgoneta repitiendo una canción de moda de estilo regatoniano que amenizaba tanto a público como a los que marchaban.
El resto de los días de las fiestas, hubo diversión tanto mañanas como noches, asimismo, el domingo pudo disfrutarse de un pasacalles a cargo del Grupo de Gaitas. Y más tarde, a las doce y media de la mañana hubo una misa solemne cantada por la Coral de Cortegada que fue posteriormente seguida de una procesión, y más tarde la sesión vermuth que amenizó la orquesta Poceiro Big Band. Ya por la noche, la misma orquesta junto con la orquesta Hollywood de Santander amenizaron la verbena para los trasnochadores.
El segundo día de fiestas y que fue también el ecuador de las mismas, el pasado lunes a las doce y media de la mañana, hubo una misa solemne y más tarde una procesión.
A continuación se pudo disfrutar de la sesión vermuth como el día anterior, pero en esta ocasión a cargo de la orquesta Suavecito, que esperó a la noche para seguir deleitando a su público, junto con la orquesta Solara.
Ayer se puso punto y final a las festividades empezando el día con una misa rezada por los vecinos fallecidos a las once y media de la mañana, y ya por la tarde, a las siete, se produjo el Desfile de Carrozas. Finalmente, por la noche, la orquesta Israel y el grupo Claxxon fueron los encargados de la verbena que cerró las Festas de Rubiáns.
(Fonte: Marta Rodriguez, Faro de Vigo)
(Foto: Dos niñas presumen de su traje folclórico. Iñaki Abella )
El Desfile de Carrozas es una especie de carnaval de verano ya hace unos años instaurado, en el que muchos disfraces están basados en temas de actualidad. Lo suelen organizar los vecinos de todos los lugares que pertenecen a Rubiáns. No es obligatorio disfrazarse y siempre es una sorpresa cuánta gente participará en él hasta que comienza.
Este año pudieron verse algunos disfraces de los de siempre como el de sevillanas o una pequeña mariquita, pero destacaban sobre todo dos grupitos uniformados: un grupo de ciclistas– moteros con la bandera de España y un grupo de "prostitutas" vestidas con papel de periódico y con los nombres de algunos periódicos en la parte posterior de su espalda. Uno de los disfrazados con el titular "O Nooso Caso", y no faltó tampoco Urdangarín con un maletín con el mismo enunciado, y la infanta Cristina de su mano, muy felices y sonrientes.
Otro disfraz destacado lo llevaba una mujer completamente cargada con bolsos y con un cartel de todo a 1 euro, a modo un poco de burla a la crisis y a los mercadillos.
Y a la cola de todo, cerrando el pintoresco desfile, les acompañaba una furgoneta repitiendo una canción de moda de estilo regatoniano que amenizaba tanto a público como a los que marchaban.
El resto de los días de las fiestas, hubo diversión tanto mañanas como noches, asimismo, el domingo pudo disfrutarse de un pasacalles a cargo del Grupo de Gaitas. Y más tarde, a las doce y media de la mañana hubo una misa solemne cantada por la Coral de Cortegada que fue posteriormente seguida de una procesión, y más tarde la sesión vermuth que amenizó la orquesta Poceiro Big Band. Ya por la noche, la misma orquesta junto con la orquesta Hollywood de Santander amenizaron la verbena para los trasnochadores.
El segundo día de fiestas y que fue también el ecuador de las mismas, el pasado lunes a las doce y media de la mañana, hubo una misa solemne y más tarde una procesión.
A continuación se pudo disfrutar de la sesión vermuth como el día anterior, pero en esta ocasión a cargo de la orquesta Suavecito, que esperó a la noche para seguir deleitando a su público, junto con la orquesta Solara.
Ayer se puso punto y final a las festividades empezando el día con una misa rezada por los vecinos fallecidos a las once y media de la mañana, y ya por la tarde, a las siete, se produjo el Desfile de Carrozas. Finalmente, por la noche, la orquesta Israel y el grupo Claxxon fueron los encargados de la verbena que cerró las Festas de Rubiáns.
(Fonte: Marta Rodriguez, Faro de Vigo)
(Foto: Dos niñas presumen de su traje folclórico. Iñaki Abella )
